“Todos somos storytellers. Todos vivimos inmersos en una trama de historias. No hay conexión más poderosa entre la gente que las historias”. Jimmy N. Smith.
Una buena historia puede hacer brillar u opacar una presentación, conversación o discurso.
Desde el descubrimiento de las pinturas en las cavernas, contar historias es uno de los métodos fundamentales de comunicación.
Los eventos, las experiencias bien contadas activan el funcionamiento completo de nuestro cerebro.
Cuando contamos historias ayudamos a dar forma a nuestros pensamientos y formas de vivir.
A la vez, generamos el mismo proceso y efecto en los demás.
Producimos sincronía con el oyente poniendo en funcionamiento las mismas áreas del cerebro que reproducen la experiencia racional y emocional que contamos.
Hacemos que nuestra audiencia experimente lo mismo que expresamos.
Nuestro cerebro está cableado para storytelling.
Cómo ocurre esto? Por qué? Por qué este impacto y este efecto de recordación, aprendizaje?
Una historia descompone y explica en causa y efecto hilvanando lo que transmitimos y generando comprensión con emociones asociadas, reflejando y mostrando la forma en que pensamos y experimentamos.
Nos comprendemos y comprendemos al mundo con historias que dan sentido a cada acción y pensamiento.
Cada vez que escuchamos alguna historia o reflexión, cuando tomamos una decisión o intervenimos en alguna, relacionamos lo que ocurre con experiencias que ya hemos vivido. Lo hacemos automáticamente.
Es por ello que las metáforas funcionan tan bien: mientras escuchamos y buscamos esta información estamos activando la zona de nuestro cerebro que nos permite revivir la misma experiencia de dolor o placer que el orador/comunicador propone.
El alcance de las historias trasciende en las comunidades generando significados que producen identificaciones relevantes. En las empresas resuena en sus clientes internos y externos.
El impacto de la generación sistémica de auténticas historias compartidas en las organizaciones (su núcleo consciente y aprendiente) las transforma en un tejido de potencia inclusiva, creativa e innovadora, base para la expansión del talento y la creatividad.
Convocar desde la visión, misión y los valores compartidos se transforma en una herramienta sinérgica potente a partir de la incorporación resonante de Storytelling en la estructura, procesos y múltiples canales de comunicación.