Una historia que ayuda a “abrir bien los ojos”

Conocí a Guido poco tiempo después de haber superado la etapa más crítica de su enfermedad. Había quedado abruptamente ciego y sordo en 2011, en coma un mes a partir de una meningitis. En un largo proceso, comenzó su exitosa recuperación. Recorrió un camino sinuoso, plagado de obstáculos y con una realidad emocional consonante con la que vivimos actualmente pero más extrema.

Compartiendo hoy con Guido proyectos y conversando con él sobre la actualidad que estamos viviendo, recorremos un paralelo entre las emociones que él vivió con su enfermedad y las que hoy atravesamos.

Había quedado durante un largo período totalmente aislado, realmente aislado. Cuando despertó del coma asomó a un mundo sin dimensiones ni referencias, como flotando en el espacio: no veía ni oía y todo era oscuridad y silencio. Se comunicaba solamente con letras de goma eva como las de la imagen y así se enteró de su estado, ignorando lo que le había sucedido.

Guido comenta que atravesó la angustia, ansiedad, frustración, desesperación, miedo a la muerte, desamparo, enojo, ganas de abandonar todo intento. Hoy son recuerdos que puede evocar con otros ojos pero que no dejan de movilizarlo cuando lo invaden y se hacen presente esas emociones en este aislamiento.

Es conmovedor lo que comparte sobre su profundo proceso interno de cambio espiritual. Atravesando vivencias extremas pudo conectarse nuevamente desde un lugar diferente al que vivía con el ritmo vertiginoso de productor de televisión, lugar que le impedía percibir lo que le estaba sucediendo.

Hoy también consciente de la situación que vive la gente carenciada y excluida de la posibilidad de consumo, Guido colabora con acciones para acercar alimentos y elementos de primera necesidad

Este proceso de aceptación, de empoderamiento y superación personal le permite tener hoy un desarrollo profesional exitoso compartiendo su aprendizaje tanto en su libro “Abrir los Ojos” como en conferencias y actividades motivacionales. Como Guido lo expresa:

los cambios en mi vida a partir de la experiencia de ese 25 de mayo del 2011  me permiten elegir: no ser sordo a mi verdadero ser, no ser ciego a lo que veo y siento, vivir consciente cada momento, cuidándome y valorando mis afectos y vínculos. A pesar de lo duro del camino recorrido, sigo eligiendo al Guido de hoy: consciente, real y presente, comprometido día a día con este nuevo abrir los ojos”.

mp

2-7-20

#coronavirus #aislamiento #abrirlosojos #guidofernandezcornide #empowering #presentaciones #motivacion #storytelling

Comparta esta publicación!